María nos cuenta su PESADILLA

Venían a por mi, lo sabia. No lo esperaba, pero de alguna manera lo sabía. Querían que me fuera con ellos pero no me iré de ninguna manera. Al principio estaba segura de que no me convencerían pero al final les fui entendiendo. Solo podía ser mejor para mi. Ya que la muerte de mis padres me había dejado un tanto afectada. Para poder empezar otra vida con gente diferente y amigos diferentes. Hasta ahí estuve de acuerdo; pero luego me dijeron lo de estar con gente como yo, con gente transtornada mentalmente, es decir, loca. Yo no estoy loca, simplemente veo fantasmas, a veces, pero después de lo de haber matado a mi padres (sin intención que conste), pues deben creer que es mejor mantenerme alejada del mundo por si soy peligrosa. Me llevaron a una sala la cual era enteramente blanca, sin nada, simplemente una cama con sábanas blancas, una ventana en el techo, un baño y un armario con ropa únicamente blanca. Creo que esto es excesivo, no voy a aguantar mucho aquí. A lo mejor si me comporto como una persona normal, tranquila y pacífica me dejen salir de esto. De repente estoy como en otro mundo. Todo es mucho más oscuro, como si alguien acabara de apagar la luz; ahora me doy cuenta, era sólo una pesadilla, solo una pesadilla...