jueves, 18 de febrero de 2010

David Gómez está leyendo Tengo el aura un poco gris

Este libro trata de todo lo que le rodea a un niño, Gen. Él siempre estaba pensando en catástrofes y era muy maniático, por eso su madre un poco cansada de Gen, quería darse unas vacaciones viajando a Lisboa y dejando a su hijo con sus abuelos. La madre era un poco rarita y de vez en cuando inmadura. A Gen no le apetecía nada ir con sus abuelos, porque en ese pueblo no hay niños y no podía jugar con nadie. Cuando llegaron a casa de los abuelos, estos les recibieron con mucho énfasis y cariñosos. Al día siguiente el abuelo y Gen fueron a la huerta a recojer patatas,zanahorias y tomates. Al llegar a casa la abuela puso a cocinar todo lo que trajeron de la huerta su nieto y su marido. A las 14:30 se pusieron a comer. Después de comer todos se echaron la siesta y despues de dormir un par de horas la madre de Gen se fue al aeropuerto a coger su vuelvo hacia Lisboa.

Este libro me gusta, me lo regalaron por reyes y lo leo bastante.

Si por Gen no fuese, su madre sería un completo desastre, no pagaría las facturas, nunca tomarías las pastillas que le receta el médico, saldría de casa sin las llaves... Todo esto, le resulta a veces, bastante pesado, pero tiene su parte buena y es que le da una buena razón para estar en el mundo: cuidar de su madre.


La madre de Gen siempre piensa que todas las personas del mundo deberían tener un objetivo en la vida y tener las ideas claras. Por eso, de vez en cuando se toma unas vacaciones para proponerse nuevos objetivos y ver claro el sentido de la vida.

Llegó la hora de despedirse de la madre de Gen. Esta le dio un gran achuchón a su hijo. La madre de Gen era muy impuntual, y ese día no iba a ser diferente, ¡por poco pierde el vuelo! Al final Gen, estaba muy contento de estar en casa de sus abuelos, pues lo cuidaban muy bien. Ese mismo día, el abuelo llevó a Gen a las viñas. Quería enseñarle a conducir un tractor. La verdad es que no fue muy bien, Gen siempre calaba el tractor o se chocaba. Por más que el abuelo lo intentaba, no conseguía que su nieto estuviese diez segundos con el tractor encendido y controlado.

David Gómez Fdez, 1ºE

2 comentarios:

  1. Me gustaria leer ese libro alguna vez pero tengo ya muchos en la estanteria me los tendre que leer.Parece interesante un saludo,Jorge

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  2. Rebeca La Zanahoria11 de marzo de 2010, 16:22

    Me gustaría leer este libro, parece interesante... ;)
    Un saludo.

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